El Gobierno y Pueblo Boliviano han aprendido sobre la marcha a Resistir y Vencer los diversos intentos golpistas, separatistas y de intervencionismo del Imperio.
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A las puertas de la Reelección del Gobierno Boliviano, el Binomio Evo-Álvaro se consolida una amplia ventaja lo que permitirá la profundización del proceso de cambio, con amplias raíces originarias y populares.
El próximo domingo 6 de diciembre cerca de cinco millones de Bolivianos y Bolivianas acudirán a las urnas para elegir Presidente, Vicepresidente y los 166 miembros de la nueva Asamblea Legislativa Plurinacional.
El próximo domingo 6 de diciembre cerca de cinco millones de Bolivianos y Bolivianas acudirán a las urnas para elegir Presidente, Vicepresidente y los 166 miembros de la nueva Asamblea Legislativa Plurinacional.
Esta vez el candidato por el Movimiento al Socialismo Evo Morales, se planteo la meta de lograr las 2/3 partes de la cámara de senadores que permita la aprobación de las leyes para que entre en vigencia la Nueva Constitución Política.
No obstante el candidato del MAS, no tuvo reparo en renunciar al secreto bancario, esta semana le mostró al país su patrimonio, en lo que constituyo un verdadero acto ético y de honestidad con la gran mayoría de los Bolivianos; sepultando así un pasado oscuro de corrupción entreguismo y la antidemocracia.
Es inocultable el grado de legitimidad popular que posee el Gobierno Boliviano, su capacidad de gestión, el mejoramiento de la economía en medio de la crisis económica mundial y los avances sociales indescriptibles.
Sin embargo, la injerencia imperial en Bolivia no se detiene en sus intentos por recuperar su espacio perdido, hoy desplazado por la voluntad popular expresada desde los sectores sociales que agrupan a miles de Indígenas, campesinos, obreros, estudiantes, intelectuales, y activistas comprometidos con el proceso. Los planes injerencistas del imperio funcionan a través de las Agencias como la CIA, DEA, NAS, y muchas ONGS, que bajo la tutela de defender los Derechos Humanos y la Democracia actúan como elementos de penetración imperial.La en múltiples ocasiones denunciada “Agencia de cooperación” USAID se ha convertido en la plataforma y cobertura para que los tentáculos imperiales en el País Andino se ejecuten los planes Separatistas, Autonomistas y Divisionistas. Pese a esto el Gobierno y Pueblo Boliviano han aprendido sobre la marcha a Resistir y Vencer los diversos intentos golpistas, separatistas y de intervencionismo del Imperio.
Mientras la derecha opositora, a través de sus medios de desinformación insisten en descalificar al gobierno y atemorizar al electorado La Corte Nacional Electoral que también es un escenario controlado por la raquítica oposición levantó las restricciones para que más de 400.671 electores tengan su derecho al voto el próximo domingo.
Pero lo que sin duda alguna llama la atención y hace de este proceso algo suigeneris es la amplia participación de la mayoría de los Bolivianos en el proceso, la apertura del gobierno permite un ejercicio positivo y de futuro en la relación y confluencia entre los diversos sectores sociales y políticos en la dimensión de avanzar y profundizar las grandes trasformaciones por desarrollar.Por su parte el candidato opositor Manfred Reyes Villa, aliado incondicional del gobierno de Sánchez de Lozada, ya tiene comprado los boletos para viajar el lunes luego de las elecciones generales en franca huida para no rendir cuentas a la justicia Boliviana, recordemos que este sujeto está siendo enjuiciado por los manejos ilícitos del dinero en la anterior campaña en Cochabamba.Los movimientos sociales constituyen la base del proceso de cambio emprendido en Bolivia y este componente tan trascendental hace del proceso juegue un papel muy importante en las nuevas relaciones multilaterales entre nuestros pueblos y que fortalece el noble empeño de unidad e integración latinoamericana expresado en el ALBA, la UNASUR y el TCP.
Así como lo sentenciara el Gran Túpac Katari y hoy lo refrenda Evo al final de sus proclamas ante el multitudinario respaldo popular. El Proceso de Cambio en Bolivia es del Pueblo. (KAOS EN LA RED)
EL RETO DE EVO MORALES PASA POR GANAR EN REGIONES REBELDES
Bolivia acude a las urnas el domingo en un clima de calma pero las elecciones serán la prueba de fuego para Evo Morales que siempre salió derrotado en cuatro regiones rebeldes gobernadas por la oposición conservadora.
Todas las encuestas vaticinan un triunfo holgado del mandatario, pero lo que está en juego es el control pleno de la futura Asamblea Legislativa que es clave para que Morales consolide la nueva Constitución, que configura un estado plurinacional con más participación de la mayoría indígena.
Desde su elección en diciembre de 2005, Morales ganó ampliamente en tres consultas posteriores pero fue derrotado en Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija donde las demandas de autonomía son muy fuertes. Mientras que en La Paz, Oruro, Potosí y Cochabamba sacó amplia ventaja y en Chuquisaca hubo un virtual empate en la última consulta. La Paz concentra al 30% del electorado y es el principal bastión del mandatario.
Ese panorama configuró una Bolivia con poderes divididos lo que ahondó la polarización hasta finales del año pasado. El Senado está bajo control opositor.
El doble reto de Morales pasa por tener pleno control del Legislativo pero también por ganar en regiones opositoras. En declaraciones recientes reconoció que tiene el gobierno pero no el poder.
Para la oposición se trata de derrotar los afanes totalitarios del mandatario, según postuló en su campaña el principal candidato opositor Manfred Reyes Villa.
Las elecciones confrontan también dos visiones contrapuestas sobre el país. Morales reivindica un proyecto nacionalista, de reclamación étnica y de fuerte retórica antiimperialista. La oposición conservadora defiende una economía de libre mercado con fuerte peso de grupos corporativos.
El país transitó en los últimos años entre esos dos proyectos encontrados sin un centro fuerte que atempere la lucha política.
Pero esta disputa se jugará en dos tiempos. La segunda parte será en abril cuando se elija a gobernadores, alcaldes y legislativos regionales.
El respaldo a Morales viene de regiones de occidente donde está La Paz y cuya economía es dominada por la declinante minería. La oposición está centrada en la rica Santa Cruz donde está la agroindustria, el excedente del futuro, y en Tarija donde están los hidrocarburos, principal riqueza del país.
Más del 70% de las exportaciones son materias primas y eso hace muy vulnerable la economía a los factores externos, pero el auge de los precios hasta el año pasado jugó a favor de Morales.
Lo que está en juego es el pluralismo de la democracia boliviana, afirma el analista Fernando Mayorga.
Morales parece tener el camino allanado con una nueva Constitución que aún debe ser implementada y posiblemente un Legislativo dominado por su partido el Movimiento al Socialismo (MAS). En sus últimas apariciones públicas dobló la apuesta a que logrará dos tercios de la votación.
La oposición conservadora, debilitada y dividida, no parece tener mayor chance y ha decidido replegarse convencida de que éste es el momento político de Morales. "Veremos qué pasa en los siguientes tres años. La gente se desencantará y allí estaremos nosotros", dijo el líder cívico de Santa Cruz, Guido Náyar.
Al margen de ello, la elecciones y referendos por autonomía del 6 de diciembre tienen características históricas. Será el primer proceso electoral en el marco de la nueva Constitución impulsada por Morales.
También se aplicarán importantes cambios al sistema electoral y a la estructura y organización territorial del Estado que reconoce autonomía relativa a las regiones incluyendo a los indígenas. (TERRA DE ESPAÑA)
LA AGONÍA DE LOS OTROS INDÍGENAS BOLIVIANOS
Los aymara tienen una bandera que los identifica. Se trata de la wiphala que con sus siete colores representa las creencias y costumbres de esta etnia andina que junto a la quechua es la más numerosa de Bolivia y a la que pertenece Evo Morales. La wiphala no falta en ninguno de los actos electorales en los que participa, para no olvidar que se trata del primer presidente indígena elegido en un país. Durante los tres años que lleva en el poder, Morales ha mostrado su intención de integrar a los indígenas (que aquí suponen la mitad de la población) en una sociedad que durante siglos los ha tratado como ciudadanos de segunda. Sin embargo, y a pesar de que los indígenas han conquistado muchos espacios de la vida pública vetados hasta hace muy poco, la realidad es que algunas de las casi 40 etnias que coexisten en Bolivia agonizan.
Otto es uno de los líderes de Nueva Jerusalén, una comunidad de la etnia ayorea del departamento de Santa Cruz. Además de su liderazgo innato, se ha convertido en uno de los cabecillas del poblado porque habla de manera fluida el castellano, además del ayoreo, algo que no pueden decir muchos de sus vecinos, sobre todo los más mayores. Hasta hace poco más de cuatro décadas, los componentes de esta etnia vivían al margen de la civilización: iban semidesnudos, eran nómadas y se dedicaban a asaltar los pueblos vecinos. Ahora se trata de una etnia en proceso de desestructuración y en peligro de extinción, incapaz de adaptarse a la sociedad que los rodea pero que a su vez está perdiendo su cultura, sus tradiciones y su memoria como grupo. No hay cifrasexactas sobre el número de ayoreos que queda pero se calcula que son entre 1000 y 3000, repartidos entre Bolivia y Paraguay.
En esta comunidad cerca San José de Chiquitos en la que viven 15 familias las casas no tienen paredes. “No se adaptarían a ellas porque sienten que están encerrados y para ellos el contacto con la naturaleza es esencial. En otros pueblos ayoreos se han construido escuelas y casas y al final ellos mismos han acabado vendiendo las ventanas y el resto de materiales. Es inútil intentar que vivan de la manera en la que nosotros creemos que hay que vivir porque así no se consigue que se integren” cuenta Yovana Rivero, responsable del CIEP (Centro de Investigaciones de Energía y Población), una organización que trabaja para intentar mejorar las condiciones de los integrantes de este poblado sin que pierdan su identidad. Pero eso no siempre es fácil: los adultos se quejan de que los 16 niños que acuden a la ‘escuela’ (una rudimentaria construcción de madera y uralita) reciben las clases en castellano y temen que se pierda su lengua. Además han perdido muchas de sus costumbres como las fiestas que celebraban sus antepasados.
Ese temor a la desaparición es, paradójicamente, uno de los mayores problemas para que este tipo de etnias minoritarias sobrevivan. Los adultos prefieren que sus hijos no abandonen el poblado ni siquiera para estudiar a pesar de que no cuenten con las infraestructuras más básicas como es el agua o la luz. “La ciudad está llena de peligros como las drogas, el alcohol y la delincuencia. Eso no pasa en la naturaleza. Muchos han dejado su comunidad pensando que todo sería más fácil en la ciudad pero sólo se han encontrado cosas malas”, dice una de las mujeres en ayoreo mientras Otto nos hace de intérprete. Para ellos, la agricultura y la artesanía son las únicas fuentes de ingresos.
Y, en parte, esta señora tiene razón. Desde CIEP y Ayuda en Acción – las organizaciones que trabajan en esta comunidad – aseguran que “muchos ayoreos que están en la ciudad (principalmente en Santa Cruz, capital del departamento homónimo) han acabado dedicándose a la prostitución y a la mendicidad”, algo que se puede comprobar fácilmente dando un paseo por la ciudad.
Si a esa barrera que los ayoreos construyen para separase del resto de la sociedad – lo que no significa que sean reservados, al contrario, nos reciben y hablan con una sonrisa, sobre todo los más pequeños, que adoran las cámaras de fotos – sumamos el olvido institucional, tenemos todos los ingredientes para hablar de una comunidad hundida en la miseria que apenas puede pensar en un futuro. El grupo se estableció en estas tierras después de que se les otorgara la titularidad hace unos años por la aplicación de las leyes que reconocían los derechos de los indígenas. Pero las autoridades no se han encargado de nada más, ni de que llegue la luz y el agua ni de acondicionar caminos de entrada o salida a las comunidades.
“Hay muchas dificultades para llegar hasta ellos, desde los propios problemas que ellos ponen, al idioma o el factor físico, porque para venir hasta aquí hay que coger un camino que está a más de una hora andando de la carretera más próxima”, explica Yovana. Ellos lo saben y, algunos, han conseguido organizarse para intentar que su voz también se escuche en este “estado plurinacional”, como el mismo Evo lo definió el día que presentó su primer gabinete en el que incluía a cuatro ministros de origen indígena. Pero no hay ayoreos en ese gobierno y eso a Otto no se le olvida, a pesar de que crea que tener un presidente indígena es un gran avance. “Evo fue nuestro compañero en la marcha indígena y dijo que cuando llegara al poder iba a formar un gobierno plurinacional con representaciones de todas las etnias, pero eso no ha sido así. Los indígenas, sobre todo los grupos mayoritarios, sí han conseguido mejores condiciones pero no todos, no los ayoreos”.
A lo mejor a partir del próximo domingo los habitantes de Nueva Jerusalén se sienten un poco más partícipes de la Bolivia plurinacional, a pesar de que los servicios sanitarios nunca hayan ido a hacer una revisión a los niños y de que los chicos de 18 años estén recibiendo clases de tercer curso del elemental. Eso ocurrirá si Teresa Nominé, de origen ayoreo, consigue salir elegida como diputada por el partido presidencialista. “Pero ésa es una ayorea que vive en la ciudad”, recuerda una de las mujeres, como si de una traición a esa cultura que intentan salvaguardar se tratara. (P+DH)
MORALES SE DA UN BAÑO DE MASAS EN SU CIERRE DE CAMPAÑA Y PROMETE "INDUSTRIALIZAR" BOLIVIA
El presidente boliviano, Evo Morales, cerró su campaña electoral con un acto multitudinario en la localidad de El Alto, en el centro del país, en el que prometió acometer la "industrialización" de Bolivia si es reelegido para un segundo mandato de cinco años en las elecciones que se celebrarán el próximo domingo en el país iberoamericano.
EUROPA PRESS de España (www.europapress.com.es)
El presidente boliviano, Evo Morales, cerró su campaña electoral con un acto multitudinario en la localidad de El Alto, en el centro del país, en el que prometió acometer la "industrialización" de Bolivia si es reelegido para un segundo mandato de cinco años en las elecciones que se celebrarán el próximo domingo en el país iberoamericano.
El presidente boliviano solicitó el voto para su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), a las entre 800.000 y un millón de personas que según los medios locales presenciaron su último discurso de campaña. Recordó que antes de ser elegido como presidente prometió la plena alfabetización de los bolivianos y que en la actualidad, "gracias a todos" los ciudadanos, ésa era una "misión cumplida".
"Ahora deseo servir cinco años más al pueblo boliviano para industrializar el país, para integrar a Bolivia", aseguró Morales en declaraciones recogidas por la Agencia Boliviana de Información y Telesur. El mandatario señaló que tiene cerrados acuerdos para unir por carretera las nueve regiones del país: "ya tenemos casi garantizada la integración caminera", apuntó.
Además, prometió "telecomunicaciones gratuitas" para "todas" las poblaciones agrícolas gracias al acuerdo por 300 millones de dólares con China para la construcción de un satélite de telecomunicaciones. Morales también se comprometió a impulsar el turismo en todo el país y detalló que se levantarían centrales para la obtención de energía eléctrica y petroquímica en diversos puntos de la geografía boliviana.
"Estamos hablando de una gran integración de la industria y de las telecomunicaciones, que servirá para fomentar el turismo", dijo. "Estamos para pedirle su apoyo, su voto no sólo para el presidente y el vicepresidente, sino de todos los diputados que se postulan para la Asamblea Plurinacional". "Queremos servir al pueblo y ayudar a agilizar y profundizar el proceso de cambio. Deseo seguir con el pueblo boliviano", agregó.
La última encuesta sobre intención de voto, realizada por Equipos Mori y publicada este miércoles, otorga una holgada victoria a Morales, con el 52,6 por ciento de los votos frente al 21 por ciento del líder de la oposición Manfred Reyes Villa, al tiempo que descarta la posibilidad de que se celebre una segunda vuelta de los comicios generales previstos para el próximo domingo. "El domingo tenemos dos caminos: ir con el cambio para garantizarlo, consolidarlo, profundizarlo y acelerarlo, o volver al pasado, al neoliberalismo", sentenció durante la mayor concentración popular de su campaña. "Este proceso no es del Evo Morales, es del pueblo boliviano (...), bienvenidos todas y todos", apostilló.
EN EL CIERRE, EVO PROMETIÓ INTEGRAR BOLIVIA
Morales dijo que estará cinco años más para industrializar el país. El mandatario deberá agradecer su inminente reelección a La Paz, donde viven 1,2 millón electores de los 5,1 millones. Allí, la aceptación a Morales ronda el 80 por ciento.
Página 12 de Argentina (www.pagina12.com.ar)
Una marea de banderas azules, nacionales, wiphalas, sombreros de cholita y cascos de mineros llenaba el centro de la ciudad de El Alto. Según el gobierno, un millón y medio de masistas llegaron del interior de La Paz, de Oruro, Cochabamba y otros departamentos para ver la última intervención de campaña del presidente Evo Morales. El escenario se armó en la autopista que separa a El Alto de la ciudad de La Paz. En octubre de 2003 había sido campo de batalla de la Guerra del Gas, cuando la movilización de los alteños definió la renuncia del entonces presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, luego de que mandara al ejército a asesinar a más de sesenta personas. En esta población, Morales obtendría más del 80 por ciento de los votos. Allí fue con decenas de promesas para cumplir hasta 2015. “Quiero ser presidente cinco años más para industrializar al país, también para integrar a Bolivia”, dijo.
Para Morales, las elecciones ya están resueltas. Cree que será reelegido por más del 50 por ciento y que dominará los dos tercios del Congreso. “Va a haber un trabajo con nuestros parlamentarios electos desde el sábado 12 de diciembre. He pedido a los ex constituyentes, ahora ministros, que nos ayuden a aprobar urgentemente dos normas: una con relación al tema de Justicia, pero por encima está la ley marco de Autonomías”, anunció en conferencia de prensa.
En 2006, en Bolivia se hizo un referéndum para que cada departamento decidiera si quería ser autónomo del gobierno central. Morales, con el argumento de que las autonomías eran un invento de la derecha para dividir al país, hizo campaña por el “No”. El “Sí” a las autonomías se impuso en los departamentos de la Media Luna (Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija). En el Occidente se impuso el No, como quería Morales.
La Media Luna tramó estatutos autonómicos al margen de la Constitución y el Congreso, que aprobó por referéndum el año pasado. Según Morales, esas autonomías “eran utilizadas por grupos que gritaban independencia y promovían la división del país. Son los mismos grupos que hoy se presentan como candidatos a la presidencia”.
Este domingo, Cochabamba, Potosí, La Paz, Oruro y Chuquisaca podrán pensarlo de nuevo, esta vez con las “autonomías constitucionales” que propone Morales. “Cuando estas propuestas nacen del consenso de los representantes del pueblo son bienvenidas. Pero cuando surgen de sectores latifundistas y oligarcas que solamente velan por sus intereses, de ningún modo servirá al bien del conjunto”, dijo el presidente. Sin embargo, en la consulta autonómica del domingo hay una aceptación velada a los estatutos de la Media Luna. A lo sumo, el gobierno podrá modificar los textos autonómicos elaborados por los “oligarcas”.
El cierre de campaña de la oposición se realizó en la plaza 24 de Septiembre, de Santa Cruz. El segundo en las encuestas, Manfred Reyes Villa, le respondió a Morales, quien en la víspera había amenazado con encarcelar al candidato de Plan Progreso Bolivia - Convergencia Nacional (PPB-CN) luego de las elecciones. “El presidente ha dicho que va a cambiar las leyes de Justicia para meter preso a Manfred. Entonces, ¿qué quiere decir? ¿Que a todos los que piensan diferente los van a meter presos como en Cuba? No piense igual que Fidel Castro”, dijo el ex capitán.
“Es importante recuperar la libertad, el estado de derecho y la democracia, donde todos podamos manifestarnos y expresarnos”, dijo el ex aliado de Sánchez de Lozada. En las encuestas, PPB-CN mide 21 puntos porcentuales.
Según las consultas, el Movimiento Al Socialismo (MAS) conseguiría entre el 52 y el 55 por ciento de votos. Pero en el partido evalúan que la cifra será mayor. “Tendremos una victoria aplastante e histórica. Un presidente que fue electo con 53 por ciento (en 2005) y es ratificado con un 67,3 por ciento (2008), ahora será reelecto con más del 70 por ciento”, dijo Jorge Silva, diputado y vocero del MAS.
Morales deberá agradecer su inminente reelección a La Paz, donde viven 1,2 millón electores de los 5,1 millones que tiene el país. Aquí, la aceptación a Morales ronda el 80 por ciento. Percy Amaru, venido de una comunidad aymara distante una hora de El Alto, dijo a Página/12 que votará a Morales “porque es el único. Los otros son unos mañudos. Nunca tuvimos un presidente como él. Hasta ahora siempre nos habían tocado presidentes, sólo pensaban en robar al pueblo”.
Max Pérez maneja un taxi. ¿A quién votará? “Al Evo, pues. Gracias a él tengo este auto”, dijo acariciando el volante de su Toyota. Lo pudo comprar hace tres años, mediante una línea de créditos del gobierno con poco interés. Cuando asumió Morales, las reservas del Banco Central apenas superaban los mil millones de dólares. Hoy superan los ocho mil millones. En gran medida, la crecida se debe a que el Estado aumentó el porcentaje que recibe de la explotación de hidrocarburos.
Durante su último discurso de campaña, Morales detalló sus planes para el próximo mandato. Hizo una cantidad de promesas: una laptop para cada uno de los 135 mil maestros de escuelas fiscales; el satélite Tupak Katari, industrializar el litio en el salar de Uyuni; crear un seguro universal de salud; un seguro agrícola para los campesinos; construir carreteras e hidroeléctricas, entre otros proyectos.
Morales reconoció el apoyo de las organizaciones sociales. “Este proceso revolucionario nunca fracasará. Este proceso de cambio siempre triunfará gracias a la conciencia del pueblo boliviano. Los movimientos sociales tienen la obligación de controlar al gobierno para garantizar esta revolución democrática. Es un proceso de cambio imparable, irreversible”, dijo para finalizar con su habitual arenga: “Patria o muerte. ¡Venceremos!”.
ELECCIONES EN BOLIVIA: EL DOMINGO SE ELIGEN PRESIDENTE Y VICE, Y LA NUEVA ASAMBLEA PLURINACIONAL
EVO CERRÓ LA CAMPAÑA Y AFIRMAN QUE ARRASARÁ EN LAS ELECCIONES
Las encuestas lo dan ganador para renovar mandato con más de 55%. Y a su rival Reyes Villa, le auguran 18%. En medio de un mar de banderas, en el Alto, el presidente boliviano llamó a continuar la revolución que comenzó hace cuatro años.
Clarín de Argentina (www.clarin.com/diario)
El Alto, la ciudad sobre los cerros que orillan La Paz, ayer terminó de darle el empujón final a Evo Morales hacia su reelección. Las banderas rojas, amarillas y verdes de Bolivia; las multicolores wiphala del pueblo aymara y quechua, y las azules, negras y blancas del Movimiento al Socialismo formaban un mar de colores en el que una multitud coreaba "Evo, de nuevo" en el cierre de campaña del primer presidente indígena de América Latina. La euforia ganadora era tal que los pronósticos oficiales decían que este domingo ganaría por un porcentaje histórico: el 70% de los votos.
Evo Morales -con un collar de flores rojas y amarillas, restos de papel picado sobre su pelo negro y en un atardecer limpio y fresco a más de 4.100 metros de altura- llamó a continuar la revolución que comenzó hace cuatro años. Son pocos lo que dudan que este domingo el líder sindical cocalero de 50 años logrará ser el primer presidente reelegido en los últimos 45 años de historia boliviana.
El domingo que viene más de 5 millones -de los 10 millones de bolivianos- votarán a presidente y vicepresidente y por la integración de la nueva Asamblea Plurinacional de 130 diputados y 36 senadores. Las encuestas dan como ganador -por más del 55%- a Evo Morales, quien llegó al poder en diciembre de 2005 con el 53.7% de los votos y de la mano de los movimientos sociales, indígenas y los sindicatos cocaleros.
Morales fue ratificado en el referéndum del año pasado con un 67%. Según todas los sondeos el segundo lugar lo ocupará Manfred Reyes Villa, de Plan Progreso para Bolivia, quien obtendría el 18%.
Con la elección asegurada, el objetivo de Morales es lograr la mayoría absoluta en el Congreso. Estaría a tan sólo dos senadores de lograrla. Con ella se asegurará la aprobación de por lo menos cien leyes que necesita para poner en marcha la nueva Constitución, que entre otras cosas, hasta cambió el nombre al país. Ya no es una República sino el Estado Plurinacional de Bolivia, que comprende cinco niveles autonómicos y 36 naciones originario-indígena-campesinas. Además podría instrumentar el proceso de autonomías que pide parte de la oposición y que también apoya el gobierno.
"Vamos a construir un país distinto que viva en armonía con la naturaleza y vamos a consolidar esta revolución pacífica para Bolivia y el mundo", decía Don Eugenio Choque cerca del palco central y donde se estaba realizando una ceremonia a la Pacha Mama. El ritmo del altiplano del grupo Llajtaymanta hacía dar pequeños saltitos de carnavalito a Morales y a su vice, Alvaro García Linera. Un Evo inflable gigante con su clásico pullover rebotaba al ritmo de la quenas. "Vamos Evo, vamos otra vez", gritaba la gente.
En El Alto -donde todas las encuestas lo dan ganador a Morales por el 70%- se estima que vive alrededor de un millón de personas, la mayoría indígenas y campesinos que dejaron sus tierras en busca de un mejor pasar. "Aquí hay por lo menos un millón que apoyamos al proceso de cambio, la revolución pacífica y cultural", explicaba Don Choque.
Sandra es una "señora de pollera". Ayer como miles de indígenas aymaras -grupo al que también pertenece Morales-, terminó de trabajar temprano. Cerraba su pollería mientras decía: "Vamos a apoyar al Evo para que siga el cambio" y descolgaba algunas de las polleras de colores que usan las "cholitas más modernitas" y que -por cosas de la globalización brillan más que las tradicionales gracias a las telas "made in Corea". Sandra de sombrero alto, prendedor de oro y pollera de día de fiesta comenzó a caminar hacia La Ceja, el distribuidor a la entrada de El Alto, donde se estaba armado el escenario del acto. El olor que salía de las ollas indicaba que el menú del acto incluía sopa de fideos y de pollo a menos de diez centavos de dólar. Los jugos de duraznos disecados, la bebida.
Después de que el miércoles Morales lograra convocar a un acto masivo en el bastión opositor de Santa Cruz, el líder pronosticó un triunfo histórico en su reelección por 4 años más.
Además de contar con el respaldo de los sectores más pobres asegura que sumó un nuevo apoyo: el de parte de la clase media, profesionales e intelectuales.
"A los hijos de los ricos no le gusta la cara de indio del presidente, pero están de acuerdo con las políticas. Me sorprendí de ver los autos caros que acompañaron las caravanas de la campaña", contó hace unos días. Con el voto de los que usan autos caros, de los profesionales, de los intelectuales y de su base social de siempre; Morales ayer soñó ante la multitud con una reelección histórica. De no obtenerla seguirá siendo una victoria valiosa, aunque con cierto sabor amargo.
BOLIVIA: EVO AVANZA
El domingo los bolivianos acuden a las urnas para elegir presidente. Por primera vez en la historia democrática del país un mandatario boliviano lograría la reelección. Evo Morales se mantiene alto en las encuestas con una perspectiva de triunfo por arriba del 50 por ciento. La oposición le pelea cada voto y apuesta todo a impedirle la mayoría en el parlamento. En los días previos no faltaron escándalos, huelgas, protestas, denuncias de fraude, y amenazas.
Observador Global de México (www.observadorglobal.com)
Llegar a controlar con 2/3 la futura Asamblea Legislativa Plurinacional -nuevo nombre del parlamento boliviano- es el principal desafío del actual presidente y candidato Evo Morales en las elecciones que se celebrarán este domingo 6 de Diciembre.
De acuerdo a la mayoría de las encuestas, Morales tiene de lejos las de ganar por lo que su propósito (según la oposición) es copar el futuro Congreso para así tener la opción de modificar la Constitución Política del Estado; esto posibilitaría que sea elegido por tercera vez. Sus adversarios Manfred Reyes Villa y Samuel Doria Medina, muy atrás en los sondeos, intentan hacerle frente en la Asamblea legislativa, donde sí podrían evitar su poder absoluto.
A dos días de las elecciones y en un ambiente tenso y confrontado de cierre de campañas y cuestionamientos a la labor del máximo organismo electoral, el candidato oficialista Evo Morales apuesta por alcanzar 2/3 en la asamblea legislativa y 70% en las urnas, “Ganamos las anteriores elecciones con más del 60 por ciento, ahora queremos garantizar un 70 por ciento de los votos”, dijo ante una masiva concurrencia en el cierre de su campaña en la ciudad de Cochabamba.
La mayoría de las encuestas coinciden en niveles que están entre el 50 y el 55 por ciento a favor de Evo Morales, por lo que se confirma la idea de su holgado triunfo sin la necesidad de una segunda vuelta.
La encuestadora Equipos Mori, presenta a Morales como favorito en la intención de voto con 52,6 por ciento de los consultados a su favor y lleva una ventaja de 31,5 puntos al respecto de Manfred Reyes Villa, candidato por el Plan Progreso para Bolivia-Convergencia Nacional (PPB-CN), que se queda en segundo lugar con un 21 por ciento.
En la Cámara de diputados se vislumbra una contundente victoria del partido oficialista entre los 130 a ser elegidos, por lo que el verdadero escenario de medición de fuerzas será el Senado.
En esta campaña electoral, Morales ha manisfestado en reiteradas ocasiones que, “la aprobación de importantes leyes fue perjudicada en el Senado por la oposición”, de ahí la importancia de alcanzar la mayoría absoluta con 24 senadores oficialistas del total de 36.
Según declaraciones del analista Carlos Cordero al diario La Prensa, son las plazas de la Asamblea Legislativa Plurinacional las que están en disputa, “El margen de votos indecisos sigue siendo amplio a pocos días y me atrevo a decir ‘cuidado’ porque ese grupo no vaya a parar íntegramente a la bolsa del binomio presidencial. No descarto la posibilidad de que ahí se encuentre el voto oculto de las clases medias.”
El sociólogo José Mirtenbaum considera que “no está del todo definido el tema del control de la Asamblea Legislativa Plurinacional. No creo que el 6 de diciembre nos encontremos con un panorama tan adverso para la oposición si consideramos el margen de votos indecisos, blancos, nulos y secretos, que tiene la encuesta. Estamos hablando de alrededor del 12 por ciento de un voto todavía no revelado, que dudo que vaya a favorecer al MAS por lo agresivo que es el actuar de Evo Morales, un elemento que no seduce al elector." Estos indecisos pueden significar un dolor de cabeza para la reelección de Morales y García Linera. Certidumbre en quien gobernará el país los próximos 5 años pero incertidumbre en relación a si lo hará cómodamente o con una oposición resistente y tenaz en la Asamblea, eso lo que se percibe ahora en Bolivia.
A estas certezas y dudas se añade un escenario pre-electoral teñido de confrontación, insultos e incluso amenazas. Durante un encuentro con la prensa internacional el candidato opositor y segundo después de Evo Morales en las encuestas, Manfred Reyes Villa, criticó duramente al candidato oficialista por “descabezar el poder judicial y mostrar un evidente objetivo de copar los 3 poderes del estado y de protagonizar una democracia del terror al amenazar a los campesinos para que voten por él”.
Por su parte, el candidato Evo Morales anunció cárcel para Reyes Villa, su principal adversario electoral actualmente bajo arraigo judicial a raíz de un juicio por presuntas irregularidades durante su gestión como gobernador de Cochabamba, tercera ciudad del país. Reyes Villa perdió su cargo el año 2008 en un referendo revocatorio. Morales dijo en un encuentro con la prensa internacional: "...quiero decirles, vamos a cambiar la justicia y los dos (Manfred Reyes Villa y su candidato a la vicepresidencia Leopoldo Fernandez) van a estar en la carcel. Recuérdense: se va a hacer eso con semejantes delincuentes, farsantes que roban la plata del pueblo". De hecho Leopoldo Fernández está preso en la actualidad, y hace campaña desde la cárcel. Está acusado de la masacre de 11 campesinos en el Porvenir, en 2008, en uno de los peores momentos de la pelea entre Evo Morales y las regiones autonomistas del Oriente boliviano. Su mujer y su hija lo representan en los actos de campaña.
El panorama pre-electoral se complica con una huelga iniciada por 12 mujeres, aparentemente del lado opositor, que cuestionan a la Corte Nacional Electoral su decisión de habilitar a más de 400.000 potenciales electores que inicialmente fueron objetados.
Las huelguistas consideran que hubo irregularidades en el padrón electoral de los comicios generales del domingo. Hace una semana la CNE observó a 400.671 ciudadanos, el 8% de los 5,1 millones de inscritos, luego de que se comprobó, con otros sistemas de registro ciudadano, que presumiblemente no contarían con certificados de nacimiento, por lo que no podrían votar en los comicios del domingo.
El veto a estos posibles votantes llevó a los dos principales candidatos de oposición -Reyes Villa y el empresario Samuel Doria Medina- a expresar que lo mejor era que éstos no votaran por considerar que había muchas inscripciones fraudulentas, sin embargo, luego de una reunión de sala plena de la CNE se decidió "levantar toda restricción a los ciudadanos que fueron observados para que puedan votar con toda libertad el 6 de diciembre", según un fallo del tribunal electoral.
Evo Morales también criticó a la CNE por objetar a este casi medio millón de potenciales electores. Su gobierno, a través del ministro de Defensa Walker San Miguel exigió que se respete su derecho al voto. San Miguel afirmó al diario La Estrella del Oriente que "...es de plena responsabilidad del órgano electoral el buen funcionamiento del Registro Civil."
Con un padrón electoral puesto en entredicho y con una poco civilizada etapa pre-electoral se acerca el día de la elección, ¿o deberíamos decir reelección? Todo así lo indica. Ya lo decía el propio Evo Morales en junio pasado “No estamos de paso ni de visita, ni de inquilinos en Palacio (de Gobierno). Ahora estoy en condiciones de presentar un programa no sólo para cinco años, sino para 50". Si Morales es reelecto se quedaría en el gobierno hasta el año 2014, de acuerdo a la nueva Constitución Política del Estado.
No obstante el candidato del MAS, no tuvo reparo en renunciar al secreto bancario, esta semana le mostró al país su patrimonio, en lo que constituyo un verdadero acto ético y de honestidad con la gran mayoría de los Bolivianos; sepultando así un pasado oscuro de corrupción entreguismo y la antidemocracia.
Es inocultable el grado de legitimidad popular que posee el Gobierno Boliviano, su capacidad de gestión, el mejoramiento de la economía en medio de la crisis económica mundial y los avances sociales indescriptibles.
Sin embargo, la injerencia imperial en Bolivia no se detiene en sus intentos por recuperar su espacio perdido, hoy desplazado por la voluntad popular expresada desde los sectores sociales que agrupan a miles de Indígenas, campesinos, obreros, estudiantes, intelectuales, y activistas comprometidos con el proceso. Los planes injerencistas del imperio funcionan a través de las Agencias como la CIA, DEA, NAS, y muchas ONGS, que bajo la tutela de defender los Derechos Humanos y la Democracia actúan como elementos de penetración imperial.La en múltiples ocasiones denunciada “Agencia de cooperación” USAID se ha convertido en la plataforma y cobertura para que los tentáculos imperiales en el País Andino se ejecuten los planes Separatistas, Autonomistas y Divisionistas. Pese a esto el Gobierno y Pueblo Boliviano han aprendido sobre la marcha a Resistir y Vencer los diversos intentos golpistas, separatistas y de intervencionismo del Imperio.
Mientras la derecha opositora, a través de sus medios de desinformación insisten en descalificar al gobierno y atemorizar al electorado La Corte Nacional Electoral que también es un escenario controlado por la raquítica oposición levantó las restricciones para que más de 400.671 electores tengan su derecho al voto el próximo domingo.
Pero lo que sin duda alguna llama la atención y hace de este proceso algo suigeneris es la amplia participación de la mayoría de los Bolivianos en el proceso, la apertura del gobierno permite un ejercicio positivo y de futuro en la relación y confluencia entre los diversos sectores sociales y políticos en la dimensión de avanzar y profundizar las grandes trasformaciones por desarrollar.Por su parte el candidato opositor Manfred Reyes Villa, aliado incondicional del gobierno de Sánchez de Lozada, ya tiene comprado los boletos para viajar el lunes luego de las elecciones generales en franca huida para no rendir cuentas a la justicia Boliviana, recordemos que este sujeto está siendo enjuiciado por los manejos ilícitos del dinero en la anterior campaña en Cochabamba.Los movimientos sociales constituyen la base del proceso de cambio emprendido en Bolivia y este componente tan trascendental hace del proceso juegue un papel muy importante en las nuevas relaciones multilaterales entre nuestros pueblos y que fortalece el noble empeño de unidad e integración latinoamericana expresado en el ALBA, la UNASUR y el TCP.
Así como lo sentenciara el Gran Túpac Katari y hoy lo refrenda Evo al final de sus proclamas ante el multitudinario respaldo popular. El Proceso de Cambio en Bolivia es del Pueblo. (KAOS EN LA RED)
EL RETO DE EVO MORALES PASA POR GANAR EN REGIONES REBELDES
Bolivia acude a las urnas el domingo en un clima de calma pero las elecciones serán la prueba de fuego para Evo Morales que siempre salió derrotado en cuatro regiones rebeldes gobernadas por la oposición conservadora.
Todas las encuestas vaticinan un triunfo holgado del mandatario, pero lo que está en juego es el control pleno de la futura Asamblea Legislativa que es clave para que Morales consolide la nueva Constitución, que configura un estado plurinacional con más participación de la mayoría indígena.
Desde su elección en diciembre de 2005, Morales ganó ampliamente en tres consultas posteriores pero fue derrotado en Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija donde las demandas de autonomía son muy fuertes. Mientras que en La Paz, Oruro, Potosí y Cochabamba sacó amplia ventaja y en Chuquisaca hubo un virtual empate en la última consulta. La Paz concentra al 30% del electorado y es el principal bastión del mandatario.
Ese panorama configuró una Bolivia con poderes divididos lo que ahondó la polarización hasta finales del año pasado. El Senado está bajo control opositor.
El doble reto de Morales pasa por tener pleno control del Legislativo pero también por ganar en regiones opositoras. En declaraciones recientes reconoció que tiene el gobierno pero no el poder.
Para la oposición se trata de derrotar los afanes totalitarios del mandatario, según postuló en su campaña el principal candidato opositor Manfred Reyes Villa.
Las elecciones confrontan también dos visiones contrapuestas sobre el país. Morales reivindica un proyecto nacionalista, de reclamación étnica y de fuerte retórica antiimperialista. La oposición conservadora defiende una economía de libre mercado con fuerte peso de grupos corporativos.
El país transitó en los últimos años entre esos dos proyectos encontrados sin un centro fuerte que atempere la lucha política.
Pero esta disputa se jugará en dos tiempos. La segunda parte será en abril cuando se elija a gobernadores, alcaldes y legislativos regionales.
El respaldo a Morales viene de regiones de occidente donde está La Paz y cuya economía es dominada por la declinante minería. La oposición está centrada en la rica Santa Cruz donde está la agroindustria, el excedente del futuro, y en Tarija donde están los hidrocarburos, principal riqueza del país.
Más del 70% de las exportaciones son materias primas y eso hace muy vulnerable la economía a los factores externos, pero el auge de los precios hasta el año pasado jugó a favor de Morales.
Lo que está en juego es el pluralismo de la democracia boliviana, afirma el analista Fernando Mayorga.
Morales parece tener el camino allanado con una nueva Constitución que aún debe ser implementada y posiblemente un Legislativo dominado por su partido el Movimiento al Socialismo (MAS). En sus últimas apariciones públicas dobló la apuesta a que logrará dos tercios de la votación.
La oposición conservadora, debilitada y dividida, no parece tener mayor chance y ha decidido replegarse convencida de que éste es el momento político de Morales. "Veremos qué pasa en los siguientes tres años. La gente se desencantará y allí estaremos nosotros", dijo el líder cívico de Santa Cruz, Guido Náyar.
Al margen de ello, la elecciones y referendos por autonomía del 6 de diciembre tienen características históricas. Será el primer proceso electoral en el marco de la nueva Constitución impulsada por Morales.
También se aplicarán importantes cambios al sistema electoral y a la estructura y organización territorial del Estado que reconoce autonomía relativa a las regiones incluyendo a los indígenas. (TERRA DE ESPAÑA)
LA AGONÍA DE LOS OTROS INDÍGENAS BOLIVIANOS
Los aymara tienen una bandera que los identifica. Se trata de la wiphala que con sus siete colores representa las creencias y costumbres de esta etnia andina que junto a la quechua es la más numerosa de Bolivia y a la que pertenece Evo Morales. La wiphala no falta en ninguno de los actos electorales en los que participa, para no olvidar que se trata del primer presidente indígena elegido en un país. Durante los tres años que lleva en el poder, Morales ha mostrado su intención de integrar a los indígenas (que aquí suponen la mitad de la población) en una sociedad que durante siglos los ha tratado como ciudadanos de segunda. Sin embargo, y a pesar de que los indígenas han conquistado muchos espacios de la vida pública vetados hasta hace muy poco, la realidad es que algunas de las casi 40 etnias que coexisten en Bolivia agonizan.
Otto es uno de los líderes de Nueva Jerusalén, una comunidad de la etnia ayorea del departamento de Santa Cruz. Además de su liderazgo innato, se ha convertido en uno de los cabecillas del poblado porque habla de manera fluida el castellano, además del ayoreo, algo que no pueden decir muchos de sus vecinos, sobre todo los más mayores. Hasta hace poco más de cuatro décadas, los componentes de esta etnia vivían al margen de la civilización: iban semidesnudos, eran nómadas y se dedicaban a asaltar los pueblos vecinos. Ahora se trata de una etnia en proceso de desestructuración y en peligro de extinción, incapaz de adaptarse a la sociedad que los rodea pero que a su vez está perdiendo su cultura, sus tradiciones y su memoria como grupo. No hay cifrasexactas sobre el número de ayoreos que queda pero se calcula que son entre 1000 y 3000, repartidos entre Bolivia y Paraguay.
En esta comunidad cerca San José de Chiquitos en la que viven 15 familias las casas no tienen paredes. “No se adaptarían a ellas porque sienten que están encerrados y para ellos el contacto con la naturaleza es esencial. En otros pueblos ayoreos se han construido escuelas y casas y al final ellos mismos han acabado vendiendo las ventanas y el resto de materiales. Es inútil intentar que vivan de la manera en la que nosotros creemos que hay que vivir porque así no se consigue que se integren” cuenta Yovana Rivero, responsable del CIEP (Centro de Investigaciones de Energía y Población), una organización que trabaja para intentar mejorar las condiciones de los integrantes de este poblado sin que pierdan su identidad. Pero eso no siempre es fácil: los adultos se quejan de que los 16 niños que acuden a la ‘escuela’ (una rudimentaria construcción de madera y uralita) reciben las clases en castellano y temen que se pierda su lengua. Además han perdido muchas de sus costumbres como las fiestas que celebraban sus antepasados.
Ese temor a la desaparición es, paradójicamente, uno de los mayores problemas para que este tipo de etnias minoritarias sobrevivan. Los adultos prefieren que sus hijos no abandonen el poblado ni siquiera para estudiar a pesar de que no cuenten con las infraestructuras más básicas como es el agua o la luz. “La ciudad está llena de peligros como las drogas, el alcohol y la delincuencia. Eso no pasa en la naturaleza. Muchos han dejado su comunidad pensando que todo sería más fácil en la ciudad pero sólo se han encontrado cosas malas”, dice una de las mujeres en ayoreo mientras Otto nos hace de intérprete. Para ellos, la agricultura y la artesanía son las únicas fuentes de ingresos.
Y, en parte, esta señora tiene razón. Desde CIEP y Ayuda en Acción – las organizaciones que trabajan en esta comunidad – aseguran que “muchos ayoreos que están en la ciudad (principalmente en Santa Cruz, capital del departamento homónimo) han acabado dedicándose a la prostitución y a la mendicidad”, algo que se puede comprobar fácilmente dando un paseo por la ciudad.
Si a esa barrera que los ayoreos construyen para separase del resto de la sociedad – lo que no significa que sean reservados, al contrario, nos reciben y hablan con una sonrisa, sobre todo los más pequeños, que adoran las cámaras de fotos – sumamos el olvido institucional, tenemos todos los ingredientes para hablar de una comunidad hundida en la miseria que apenas puede pensar en un futuro. El grupo se estableció en estas tierras después de que se les otorgara la titularidad hace unos años por la aplicación de las leyes que reconocían los derechos de los indígenas. Pero las autoridades no se han encargado de nada más, ni de que llegue la luz y el agua ni de acondicionar caminos de entrada o salida a las comunidades.
“Hay muchas dificultades para llegar hasta ellos, desde los propios problemas que ellos ponen, al idioma o el factor físico, porque para venir hasta aquí hay que coger un camino que está a más de una hora andando de la carretera más próxima”, explica Yovana. Ellos lo saben y, algunos, han conseguido organizarse para intentar que su voz también se escuche en este “estado plurinacional”, como el mismo Evo lo definió el día que presentó su primer gabinete en el que incluía a cuatro ministros de origen indígena. Pero no hay ayoreos en ese gobierno y eso a Otto no se le olvida, a pesar de que crea que tener un presidente indígena es un gran avance. “Evo fue nuestro compañero en la marcha indígena y dijo que cuando llegara al poder iba a formar un gobierno plurinacional con representaciones de todas las etnias, pero eso no ha sido así. Los indígenas, sobre todo los grupos mayoritarios, sí han conseguido mejores condiciones pero no todos, no los ayoreos”.
A lo mejor a partir del próximo domingo los habitantes de Nueva Jerusalén se sienten un poco más partícipes de la Bolivia plurinacional, a pesar de que los servicios sanitarios nunca hayan ido a hacer una revisión a los niños y de que los chicos de 18 años estén recibiendo clases de tercer curso del elemental. Eso ocurrirá si Teresa Nominé, de origen ayoreo, consigue salir elegida como diputada por el partido presidencialista. “Pero ésa es una ayorea que vive en la ciudad”, recuerda una de las mujeres, como si de una traición a esa cultura que intentan salvaguardar se tratara. (P+DH)
MORALES SE DA UN BAÑO DE MASAS EN SU CIERRE DE CAMPAÑA Y PROMETE "INDUSTRIALIZAR" BOLIVIA
El presidente boliviano, Evo Morales, cerró su campaña electoral con un acto multitudinario en la localidad de El Alto, en el centro del país, en el que prometió acometer la "industrialización" de Bolivia si es reelegido para un segundo mandato de cinco años en las elecciones que se celebrarán el próximo domingo en el país iberoamericano.
EUROPA PRESS de España (www.europapress.com.es)
El presidente boliviano, Evo Morales, cerró su campaña electoral con un acto multitudinario en la localidad de El Alto, en el centro del país, en el que prometió acometer la "industrialización" de Bolivia si es reelegido para un segundo mandato de cinco años en las elecciones que se celebrarán el próximo domingo en el país iberoamericano.
El presidente boliviano solicitó el voto para su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), a las entre 800.000 y un millón de personas que según los medios locales presenciaron su último discurso de campaña. Recordó que antes de ser elegido como presidente prometió la plena alfabetización de los bolivianos y que en la actualidad, "gracias a todos" los ciudadanos, ésa era una "misión cumplida".
"Ahora deseo servir cinco años más al pueblo boliviano para industrializar el país, para integrar a Bolivia", aseguró Morales en declaraciones recogidas por la Agencia Boliviana de Información y Telesur. El mandatario señaló que tiene cerrados acuerdos para unir por carretera las nueve regiones del país: "ya tenemos casi garantizada la integración caminera", apuntó.
Además, prometió "telecomunicaciones gratuitas" para "todas" las poblaciones agrícolas gracias al acuerdo por 300 millones de dólares con China para la construcción de un satélite de telecomunicaciones. Morales también se comprometió a impulsar el turismo en todo el país y detalló que se levantarían centrales para la obtención de energía eléctrica y petroquímica en diversos puntos de la geografía boliviana.
"Estamos hablando de una gran integración de la industria y de las telecomunicaciones, que servirá para fomentar el turismo", dijo. "Estamos para pedirle su apoyo, su voto no sólo para el presidente y el vicepresidente, sino de todos los diputados que se postulan para la Asamblea Plurinacional". "Queremos servir al pueblo y ayudar a agilizar y profundizar el proceso de cambio. Deseo seguir con el pueblo boliviano", agregó.
La última encuesta sobre intención de voto, realizada por Equipos Mori y publicada este miércoles, otorga una holgada victoria a Morales, con el 52,6 por ciento de los votos frente al 21 por ciento del líder de la oposición Manfred Reyes Villa, al tiempo que descarta la posibilidad de que se celebre una segunda vuelta de los comicios generales previstos para el próximo domingo. "El domingo tenemos dos caminos: ir con el cambio para garantizarlo, consolidarlo, profundizarlo y acelerarlo, o volver al pasado, al neoliberalismo", sentenció durante la mayor concentración popular de su campaña. "Este proceso no es del Evo Morales, es del pueblo boliviano (...), bienvenidos todas y todos", apostilló.
EN EL CIERRE, EVO PROMETIÓ INTEGRAR BOLIVIA
Morales dijo que estará cinco años más para industrializar el país. El mandatario deberá agradecer su inminente reelección a La Paz, donde viven 1,2 millón electores de los 5,1 millones. Allí, la aceptación a Morales ronda el 80 por ciento.
Página 12 de Argentina (www.pagina12.com.ar)
Una marea de banderas azules, nacionales, wiphalas, sombreros de cholita y cascos de mineros llenaba el centro de la ciudad de El Alto. Según el gobierno, un millón y medio de masistas llegaron del interior de La Paz, de Oruro, Cochabamba y otros departamentos para ver la última intervención de campaña del presidente Evo Morales. El escenario se armó en la autopista que separa a El Alto de la ciudad de La Paz. En octubre de 2003 había sido campo de batalla de la Guerra del Gas, cuando la movilización de los alteños definió la renuncia del entonces presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, luego de que mandara al ejército a asesinar a más de sesenta personas. En esta población, Morales obtendría más del 80 por ciento de los votos. Allí fue con decenas de promesas para cumplir hasta 2015. “Quiero ser presidente cinco años más para industrializar al país, también para integrar a Bolivia”, dijo.
Para Morales, las elecciones ya están resueltas. Cree que será reelegido por más del 50 por ciento y que dominará los dos tercios del Congreso. “Va a haber un trabajo con nuestros parlamentarios electos desde el sábado 12 de diciembre. He pedido a los ex constituyentes, ahora ministros, que nos ayuden a aprobar urgentemente dos normas: una con relación al tema de Justicia, pero por encima está la ley marco de Autonomías”, anunció en conferencia de prensa.
En 2006, en Bolivia se hizo un referéndum para que cada departamento decidiera si quería ser autónomo del gobierno central. Morales, con el argumento de que las autonomías eran un invento de la derecha para dividir al país, hizo campaña por el “No”. El “Sí” a las autonomías se impuso en los departamentos de la Media Luna (Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija). En el Occidente se impuso el No, como quería Morales.
La Media Luna tramó estatutos autonómicos al margen de la Constitución y el Congreso, que aprobó por referéndum el año pasado. Según Morales, esas autonomías “eran utilizadas por grupos que gritaban independencia y promovían la división del país. Son los mismos grupos que hoy se presentan como candidatos a la presidencia”.
Este domingo, Cochabamba, Potosí, La Paz, Oruro y Chuquisaca podrán pensarlo de nuevo, esta vez con las “autonomías constitucionales” que propone Morales. “Cuando estas propuestas nacen del consenso de los representantes del pueblo son bienvenidas. Pero cuando surgen de sectores latifundistas y oligarcas que solamente velan por sus intereses, de ningún modo servirá al bien del conjunto”, dijo el presidente. Sin embargo, en la consulta autonómica del domingo hay una aceptación velada a los estatutos de la Media Luna. A lo sumo, el gobierno podrá modificar los textos autonómicos elaborados por los “oligarcas”.
El cierre de campaña de la oposición se realizó en la plaza 24 de Septiembre, de Santa Cruz. El segundo en las encuestas, Manfred Reyes Villa, le respondió a Morales, quien en la víspera había amenazado con encarcelar al candidato de Plan Progreso Bolivia - Convergencia Nacional (PPB-CN) luego de las elecciones. “El presidente ha dicho que va a cambiar las leyes de Justicia para meter preso a Manfred. Entonces, ¿qué quiere decir? ¿Que a todos los que piensan diferente los van a meter presos como en Cuba? No piense igual que Fidel Castro”, dijo el ex capitán.
“Es importante recuperar la libertad, el estado de derecho y la democracia, donde todos podamos manifestarnos y expresarnos”, dijo el ex aliado de Sánchez de Lozada. En las encuestas, PPB-CN mide 21 puntos porcentuales.
Según las consultas, el Movimiento Al Socialismo (MAS) conseguiría entre el 52 y el 55 por ciento de votos. Pero en el partido evalúan que la cifra será mayor. “Tendremos una victoria aplastante e histórica. Un presidente que fue electo con 53 por ciento (en 2005) y es ratificado con un 67,3 por ciento (2008), ahora será reelecto con más del 70 por ciento”, dijo Jorge Silva, diputado y vocero del MAS.
Morales deberá agradecer su inminente reelección a La Paz, donde viven 1,2 millón electores de los 5,1 millones que tiene el país. Aquí, la aceptación a Morales ronda el 80 por ciento. Percy Amaru, venido de una comunidad aymara distante una hora de El Alto, dijo a Página/12 que votará a Morales “porque es el único. Los otros son unos mañudos. Nunca tuvimos un presidente como él. Hasta ahora siempre nos habían tocado presidentes, sólo pensaban en robar al pueblo”.
Max Pérez maneja un taxi. ¿A quién votará? “Al Evo, pues. Gracias a él tengo este auto”, dijo acariciando el volante de su Toyota. Lo pudo comprar hace tres años, mediante una línea de créditos del gobierno con poco interés. Cuando asumió Morales, las reservas del Banco Central apenas superaban los mil millones de dólares. Hoy superan los ocho mil millones. En gran medida, la crecida se debe a que el Estado aumentó el porcentaje que recibe de la explotación de hidrocarburos.
Durante su último discurso de campaña, Morales detalló sus planes para el próximo mandato. Hizo una cantidad de promesas: una laptop para cada uno de los 135 mil maestros de escuelas fiscales; el satélite Tupak Katari, industrializar el litio en el salar de Uyuni; crear un seguro universal de salud; un seguro agrícola para los campesinos; construir carreteras e hidroeléctricas, entre otros proyectos.
Morales reconoció el apoyo de las organizaciones sociales. “Este proceso revolucionario nunca fracasará. Este proceso de cambio siempre triunfará gracias a la conciencia del pueblo boliviano. Los movimientos sociales tienen la obligación de controlar al gobierno para garantizar esta revolución democrática. Es un proceso de cambio imparable, irreversible”, dijo para finalizar con su habitual arenga: “Patria o muerte. ¡Venceremos!”.
ELECCIONES EN BOLIVIA: EL DOMINGO SE ELIGEN PRESIDENTE Y VICE, Y LA NUEVA ASAMBLEA PLURINACIONAL
EVO CERRÓ LA CAMPAÑA Y AFIRMAN QUE ARRASARÁ EN LAS ELECCIONES
Las encuestas lo dan ganador para renovar mandato con más de 55%. Y a su rival Reyes Villa, le auguran 18%. En medio de un mar de banderas, en el Alto, el presidente boliviano llamó a continuar la revolución que comenzó hace cuatro años.
Clarín de Argentina (www.clarin.com/diario)
El Alto, la ciudad sobre los cerros que orillan La Paz, ayer terminó de darle el empujón final a Evo Morales hacia su reelección. Las banderas rojas, amarillas y verdes de Bolivia; las multicolores wiphala del pueblo aymara y quechua, y las azules, negras y blancas del Movimiento al Socialismo formaban un mar de colores en el que una multitud coreaba "Evo, de nuevo" en el cierre de campaña del primer presidente indígena de América Latina. La euforia ganadora era tal que los pronósticos oficiales decían que este domingo ganaría por un porcentaje histórico: el 70% de los votos.
Evo Morales -con un collar de flores rojas y amarillas, restos de papel picado sobre su pelo negro y en un atardecer limpio y fresco a más de 4.100 metros de altura- llamó a continuar la revolución que comenzó hace cuatro años. Son pocos lo que dudan que este domingo el líder sindical cocalero de 50 años logrará ser el primer presidente reelegido en los últimos 45 años de historia boliviana.
El domingo que viene más de 5 millones -de los 10 millones de bolivianos- votarán a presidente y vicepresidente y por la integración de la nueva Asamblea Plurinacional de 130 diputados y 36 senadores. Las encuestas dan como ganador -por más del 55%- a Evo Morales, quien llegó al poder en diciembre de 2005 con el 53.7% de los votos y de la mano de los movimientos sociales, indígenas y los sindicatos cocaleros.
Morales fue ratificado en el referéndum del año pasado con un 67%. Según todas los sondeos el segundo lugar lo ocupará Manfred Reyes Villa, de Plan Progreso para Bolivia, quien obtendría el 18%.
Con la elección asegurada, el objetivo de Morales es lograr la mayoría absoluta en el Congreso. Estaría a tan sólo dos senadores de lograrla. Con ella se asegurará la aprobación de por lo menos cien leyes que necesita para poner en marcha la nueva Constitución, que entre otras cosas, hasta cambió el nombre al país. Ya no es una República sino el Estado Plurinacional de Bolivia, que comprende cinco niveles autonómicos y 36 naciones originario-indígena-campesinas. Además podría instrumentar el proceso de autonomías que pide parte de la oposición y que también apoya el gobierno.
"Vamos a construir un país distinto que viva en armonía con la naturaleza y vamos a consolidar esta revolución pacífica para Bolivia y el mundo", decía Don Eugenio Choque cerca del palco central y donde se estaba realizando una ceremonia a la Pacha Mama. El ritmo del altiplano del grupo Llajtaymanta hacía dar pequeños saltitos de carnavalito a Morales y a su vice, Alvaro García Linera. Un Evo inflable gigante con su clásico pullover rebotaba al ritmo de la quenas. "Vamos Evo, vamos otra vez", gritaba la gente.
En El Alto -donde todas las encuestas lo dan ganador a Morales por el 70%- se estima que vive alrededor de un millón de personas, la mayoría indígenas y campesinos que dejaron sus tierras en busca de un mejor pasar. "Aquí hay por lo menos un millón que apoyamos al proceso de cambio, la revolución pacífica y cultural", explicaba Don Choque.
Sandra es una "señora de pollera". Ayer como miles de indígenas aymaras -grupo al que también pertenece Morales-, terminó de trabajar temprano. Cerraba su pollería mientras decía: "Vamos a apoyar al Evo para que siga el cambio" y descolgaba algunas de las polleras de colores que usan las "cholitas más modernitas" y que -por cosas de la globalización brillan más que las tradicionales gracias a las telas "made in Corea". Sandra de sombrero alto, prendedor de oro y pollera de día de fiesta comenzó a caminar hacia La Ceja, el distribuidor a la entrada de El Alto, donde se estaba armado el escenario del acto. El olor que salía de las ollas indicaba que el menú del acto incluía sopa de fideos y de pollo a menos de diez centavos de dólar. Los jugos de duraznos disecados, la bebida.
Después de que el miércoles Morales lograra convocar a un acto masivo en el bastión opositor de Santa Cruz, el líder pronosticó un triunfo histórico en su reelección por 4 años más.
Además de contar con el respaldo de los sectores más pobres asegura que sumó un nuevo apoyo: el de parte de la clase media, profesionales e intelectuales.
"A los hijos de los ricos no le gusta la cara de indio del presidente, pero están de acuerdo con las políticas. Me sorprendí de ver los autos caros que acompañaron las caravanas de la campaña", contó hace unos días. Con el voto de los que usan autos caros, de los profesionales, de los intelectuales y de su base social de siempre; Morales ayer soñó ante la multitud con una reelección histórica. De no obtenerla seguirá siendo una victoria valiosa, aunque con cierto sabor amargo.
BOLIVIA: EVO AVANZA
El domingo los bolivianos acuden a las urnas para elegir presidente. Por primera vez en la historia democrática del país un mandatario boliviano lograría la reelección. Evo Morales se mantiene alto en las encuestas con una perspectiva de triunfo por arriba del 50 por ciento. La oposición le pelea cada voto y apuesta todo a impedirle la mayoría en el parlamento. En los días previos no faltaron escándalos, huelgas, protestas, denuncias de fraude, y amenazas.
Observador Global de México (www.observadorglobal.com)
Llegar a controlar con 2/3 la futura Asamblea Legislativa Plurinacional -nuevo nombre del parlamento boliviano- es el principal desafío del actual presidente y candidato Evo Morales en las elecciones que se celebrarán este domingo 6 de Diciembre.
De acuerdo a la mayoría de las encuestas, Morales tiene de lejos las de ganar por lo que su propósito (según la oposición) es copar el futuro Congreso para así tener la opción de modificar la Constitución Política del Estado; esto posibilitaría que sea elegido por tercera vez. Sus adversarios Manfred Reyes Villa y Samuel Doria Medina, muy atrás en los sondeos, intentan hacerle frente en la Asamblea legislativa, donde sí podrían evitar su poder absoluto.
A dos días de las elecciones y en un ambiente tenso y confrontado de cierre de campañas y cuestionamientos a la labor del máximo organismo electoral, el candidato oficialista Evo Morales apuesta por alcanzar 2/3 en la asamblea legislativa y 70% en las urnas, “Ganamos las anteriores elecciones con más del 60 por ciento, ahora queremos garantizar un 70 por ciento de los votos”, dijo ante una masiva concurrencia en el cierre de su campaña en la ciudad de Cochabamba.
La mayoría de las encuestas coinciden en niveles que están entre el 50 y el 55 por ciento a favor de Evo Morales, por lo que se confirma la idea de su holgado triunfo sin la necesidad de una segunda vuelta.
La encuestadora Equipos Mori, presenta a Morales como favorito en la intención de voto con 52,6 por ciento de los consultados a su favor y lleva una ventaja de 31,5 puntos al respecto de Manfred Reyes Villa, candidato por el Plan Progreso para Bolivia-Convergencia Nacional (PPB-CN), que se queda en segundo lugar con un 21 por ciento.
En la Cámara de diputados se vislumbra una contundente victoria del partido oficialista entre los 130 a ser elegidos, por lo que el verdadero escenario de medición de fuerzas será el Senado.
En esta campaña electoral, Morales ha manisfestado en reiteradas ocasiones que, “la aprobación de importantes leyes fue perjudicada en el Senado por la oposición”, de ahí la importancia de alcanzar la mayoría absoluta con 24 senadores oficialistas del total de 36.
Según declaraciones del analista Carlos Cordero al diario La Prensa, son las plazas de la Asamblea Legislativa Plurinacional las que están en disputa, “El margen de votos indecisos sigue siendo amplio a pocos días y me atrevo a decir ‘cuidado’ porque ese grupo no vaya a parar íntegramente a la bolsa del binomio presidencial. No descarto la posibilidad de que ahí se encuentre el voto oculto de las clases medias.”
El sociólogo José Mirtenbaum considera que “no está del todo definido el tema del control de la Asamblea Legislativa Plurinacional. No creo que el 6 de diciembre nos encontremos con un panorama tan adverso para la oposición si consideramos el margen de votos indecisos, blancos, nulos y secretos, que tiene la encuesta. Estamos hablando de alrededor del 12 por ciento de un voto todavía no revelado, que dudo que vaya a favorecer al MAS por lo agresivo que es el actuar de Evo Morales, un elemento que no seduce al elector." Estos indecisos pueden significar un dolor de cabeza para la reelección de Morales y García Linera. Certidumbre en quien gobernará el país los próximos 5 años pero incertidumbre en relación a si lo hará cómodamente o con una oposición resistente y tenaz en la Asamblea, eso lo que se percibe ahora en Bolivia.
A estas certezas y dudas se añade un escenario pre-electoral teñido de confrontación, insultos e incluso amenazas. Durante un encuentro con la prensa internacional el candidato opositor y segundo después de Evo Morales en las encuestas, Manfred Reyes Villa, criticó duramente al candidato oficialista por “descabezar el poder judicial y mostrar un evidente objetivo de copar los 3 poderes del estado y de protagonizar una democracia del terror al amenazar a los campesinos para que voten por él”.
Por su parte, el candidato Evo Morales anunció cárcel para Reyes Villa, su principal adversario electoral actualmente bajo arraigo judicial a raíz de un juicio por presuntas irregularidades durante su gestión como gobernador de Cochabamba, tercera ciudad del país. Reyes Villa perdió su cargo el año 2008 en un referendo revocatorio. Morales dijo en un encuentro con la prensa internacional: "...quiero decirles, vamos a cambiar la justicia y los dos (Manfred Reyes Villa y su candidato a la vicepresidencia Leopoldo Fernandez) van a estar en la carcel. Recuérdense: se va a hacer eso con semejantes delincuentes, farsantes que roban la plata del pueblo". De hecho Leopoldo Fernández está preso en la actualidad, y hace campaña desde la cárcel. Está acusado de la masacre de 11 campesinos en el Porvenir, en 2008, en uno de los peores momentos de la pelea entre Evo Morales y las regiones autonomistas del Oriente boliviano. Su mujer y su hija lo representan en los actos de campaña.
El panorama pre-electoral se complica con una huelga iniciada por 12 mujeres, aparentemente del lado opositor, que cuestionan a la Corte Nacional Electoral su decisión de habilitar a más de 400.000 potenciales electores que inicialmente fueron objetados.
Las huelguistas consideran que hubo irregularidades en el padrón electoral de los comicios generales del domingo. Hace una semana la CNE observó a 400.671 ciudadanos, el 8% de los 5,1 millones de inscritos, luego de que se comprobó, con otros sistemas de registro ciudadano, que presumiblemente no contarían con certificados de nacimiento, por lo que no podrían votar en los comicios del domingo.
El veto a estos posibles votantes llevó a los dos principales candidatos de oposición -Reyes Villa y el empresario Samuel Doria Medina- a expresar que lo mejor era que éstos no votaran por considerar que había muchas inscripciones fraudulentas, sin embargo, luego de una reunión de sala plena de la CNE se decidió "levantar toda restricción a los ciudadanos que fueron observados para que puedan votar con toda libertad el 6 de diciembre", según un fallo del tribunal electoral.
Evo Morales también criticó a la CNE por objetar a este casi medio millón de potenciales electores. Su gobierno, a través del ministro de Defensa Walker San Miguel exigió que se respete su derecho al voto. San Miguel afirmó al diario La Estrella del Oriente que "...es de plena responsabilidad del órgano electoral el buen funcionamiento del Registro Civil."
Con un padrón electoral puesto en entredicho y con una poco civilizada etapa pre-electoral se acerca el día de la elección, ¿o deberíamos decir reelección? Todo así lo indica. Ya lo decía el propio Evo Morales en junio pasado “No estamos de paso ni de visita, ni de inquilinos en Palacio (de Gobierno). Ahora estoy en condiciones de presentar un programa no sólo para cinco años, sino para 50". Si Morales es reelecto se quedaría en el gobierno hasta el año 2014, de acuerdo a la nueva Constitución Política del Estado.
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